Ya es la segunda ocasión que estamos presentes en el lanzamiento mundial del iPad, para los dos hemos estado en San Antonio, el primero en el North Star Mall y el segundo en La Cantera.
Como lo anunció Apple en su conferencia, el lanzamiento sería el 11 de Marzo, a las 5:00 p.m., así que, los tres fantásticos; osea, Abraham, Raúl y yo, emprendimos camino muy tempranito. Con mucha indredulidad, tanto en el puente, como en el punto de revisión después de Laredo, los oficiales nos preguntaban: ¿Sólo para eso van hasta allá? jajaja creoque tienes que ser un aficionado de verdad para hacer tal cosa. Y esque cada evento de Apple lo hacen todo un acontecimiento. Crean un ambiente festivo, te regalan cosas, te animan...hacen todo lo posible por tratar de la mejor manera a sus clientes, que hoy por hoy, hacen de la marca, la empresa líder a nivel mundial en tecnología.
El viaje lleno de risas y anécdotas entretenidas. Cruzamos por el puente Colombia,
prácticamente sin línea y llegamos a muy buena hora al Mall. Los boys, Abraham y Raúl, le corrieron a encontrar la línea, que a esa hora (pasadita de las 11:00 a.m.) ya le daba la vuelta a la tienda, mientras yo me quedé curioseando en las tiendas. Hacíamos
relevos para que cada quien pudiera ir a descansar, pasear o ir al baño. Cada criatura que nos encontramos en la fila! jaja pero la experiencia súper divertida. Nos repartieron agua, cuantas veces la necesitáramos y nos regalaron unas bolsas con revistas y un accesorio compatible con todos los gadgets de Apple.
Cuando se llegó la hora de la comida, Abraham y yo nos dimos la escapadita a P.F. Changs, que
estaba enseguida de donde estábamos formados. ¡Qué delicia de lugar! Si no han tenido la oportunidad de ir, y están cerca de uno, no la piensen 2 veces, vayan!! Las sopas (egg drop y sweet&sour), lettuce wraps, dumplings fritos, kung pao chicken, beef a la sichuan, red velvet cake y lo máximo-triple chocolate mousse. yum!
Volvimos a la fila y después de varias (muchas) horas, se llegó el momento, se estacionó un camión de UPS que contenía la preciada carga que ya cientos de personas estabamos esperando; la fila ya se había extendido por varios kilómetros.
Pasaron los trabajadores de la tienda aplaudiendo y animando a la gente,
lo cual es indicativo que en pocos momentos abrirían, las vitrinas ya estaban listas. El plan era que Raúl y
Abraham iban por su nueva herramienta de trabajo; su iPad, porque gracias al duro trabajo en la oficina, que generó ganancias, les daba para hacer la inversión.
Pasaron preguntando cuántos iPad 2 por persona
pensábamos comprar, y era el mismo número de cartoncitos que te daban, porque al entrar a la tienda, eso indicaría al que te iba a atender, las tabletas que te vendería.
Comenzó a avanzar la fila, en el cielo sobrevolaba un helicóptero de las noticias locales, el corazón nos latía más rápido, lleno de emoción, nuevamente pasaron preguntando si alguien había cambiado de opinión y quería más cartoncitos para comprar más de un iPad, cuando mi Pollito levantó la mano...había decidido que me compraría el mío. ¡YUJUU! Entramos, nos atendieron excelentemente, yo ya sabía que quería el blanco con el smart cover o verde, o naranja, sólo faltaba verlos de cerca para tomar la decisión final, que fué el naranja. Mi Pollis quería el negro, pero a él le costó un poco más elegir el color de su smart cover, finalmente agarró el negro de piel (que luego lo cambió por un beige y finalmente se quedó con el rojo, que se ve increíble).
Al salir, la gente de la tienda te aplaudían, te sentías todo un campeón! jajaja cool!
Nos fuimos rápido al Starbucks del centro comercial para abrir y probar nuestros recién adquiridos iPad 2. ¡Geniales! A poco más de una hora, los iPads ya estaban sold-out.
Contentos nos fuimos a cenar y manejamos al hotel en San Marcos para descansar de tan larga, pero divertida jornada.
Al día siguiente, por supuesto que fuimos a comer a Salt Lick. Resulta que ese fin de semana
coincidió con
el festival South by Southwest en Austin , de tal manera que el lugar estaba a reventar de asistentes de todas partes del país, así como bikers. Por ahí vimos al dueño y mero-mero del emporio acompañado de un fotógrafo, documentando todo lo que pasaba. Aún que llegamos a primera hora, nos tocó esperar debido a lo anterior mencionado.
La espera se hizo menos con la ayuda de una limonada refrescante que la preparan al momento que la pides, y las conversaciones de la gente, como el que estaba enseguida de nosotros, era un corresponsal de una cadena de TV que había viajado para cubrir el SXSW, pero no se pudo resistir llegar a Salt Lick y probar por primera vez (según sus palabras) el verdadero bbq tejano.
Como siempre, la comida increíble, el pay de nue fenomenal, las beef ribs fabulosas y nuestras barrigas llenas y contentas! Hora de subirnos al carro y emprender el camino de regreso. Cabe mencionar que el estacionamiento estaba completamente lleno, hasta trailers de la compañía de guitarras Gibson estaban ahí. Toda una aventura.
Tenemos el corazón agradecido con nuestro Abba Padre por siempre guardarnos y darnos tanto que no merecemos. Te amamos Dios, que a pesar de conocer las profundidades de nuestro corazón, nos amas y nos llevas en Tu mano.